Cintia Ana Morrow para Argentinos.es

¿Alguna vez imaginaste vivir en otro país?
Si, siempre fui bastante aventurera. Dejé España en el 2003, tenía 34 años. Seguí a mi marido y nos traslados a
Italia por su trabajo. Como en principio íbamos solo para tres años, no me
planteé grandes proyectos: aprender el idioma, disfrutar del tiempo para
aprender y conocer la cultura del nuevo país y sobre todo aprovechar mi tiempo
libre para estar con mi hija, que por aquel entonces tenía 5 años.
¿Y dónde estás hoy?
Ahora mismo vivo en Lille (Francia)
desde hace 2 años. Antes viví en Milán 9 años, el resto de mi vida he vivido en
San Sebastián, salvo los 4 años que estuve en Barcelona durante mi época de
estudiante.
¡9 años en Milán es mucho tiempo! ¿Te sentiste un poquito milanesa al cabo
de tantos años?
La verdad es que Italia me encanta. Milán me
gusta muchísimo y sí me siento un poco milanesa. Me identifiqué rápidamente
tanto con la ciudad como con su gente, y algo de milanés se me ha quedado. Echo
de menos muchas cosas: la comida, ¡el café! (soy muy cafetera), la moda, el
arte, la música italiana y el carácter de su gente. Son muy cercanos y te hacen
sentir bien enseguida.
Me contabas que al cambiar de país, dejaste atrás muchas cosas. ¿A qué te
dedicabas en España?
Soy Diseñadora de Moda, en España daba clases de
diseño en una escuela y era Responsable del Visual Merchandising España de una
cadena de pret-à-porter francesa.
Al principio fue duro no trabajar, pero cuando
supe que nos quedábamos más tiempo, empecé a buscar trabajo y lo encontré. Fue
una experiencia fantástica, imagínate... trabajar en moda en una de las
capitales de la moda. ¡Fue todo un lujo!
De
todas las experiencias que habrás tenido quería preguntarte sobre los típicos
clichés: es verdad la fama que tienen los italianos de ser enredados y la de
los franceses de ser poco amistosos?
La verdad es que los italianos son bastante
liantes, complican las cosas, en vez de hacerlas en 2 pasos las hacen en 6,
pero bueno, al final lo consiguen. ¡Son así!

¿En qué lugar te sentiste más cómoda? ¿El idioma tuvo que ver con eso?
En Milán me sentí muy cómoda, en Lille todavía
me cuesta. Cuando llegue a Italia, no hablaba italiano, así
que al principio y durante bastante tiempo (unos 6 meses) estuve tomando clases
particulares. Después me apunté a un curso para preparar un examen para extranjeros
y lo saqué. Después de 9 años en Italia, domino perfectamente el italiano.
El francés lo hablaba ya cuando llegue a Francia.
¿En qué crees que te cambió esta aventura de vivir en el extranjero?
Me volví más tolerante con las
costumbres diferentes, pero a la vez mas crítica con mi país. También más
sociable, más segura de mí misma. La verdad es que me he acostumbrado, pero hay
ocasiones que echo de menos mi familia y mi tierra.
¿Ser padres en otro país es más o menos difícil de lo que pensabas?
Puede resultar más complicado a nivel logístico,
sobre todo si trabajas. No tienes la abuela o la hermana para que te ayuden,
pero normalmente siempre hay alguna buena amiga que te echa una mano en caso de
apuro. Para los hijos es súper-enriquecedor, se lo recomendaría a todo el
mundo. Les hace ser mucho mas abiertos, sociables y cultos.
Yo tengo una hija de 16 años que ha vivido la mayor
parte de su vida fuera de España, así que no le supone ningún problema vivir en
distintos países, tiene una gran capacidad de adaptación y una mente muy
abierta (es una de las ventajas de los niños expatriados).
¿Cómo imaginás tu vida en 10 años? ¿Seguirás viajando?

En pocas palabras:
Viajás con el pasaporte… ¡si!
¿Amás u odiás los aeropuertos? No me
molestan
¿Pasta o pollo? Pasta
La comida que más extrañás… El jamón ibérico
Un lugar de vacaciones… Santorini en plan
relax, Nueva York en plan urbano
¿Qué elemento viaja con vos siempre? Mi secador de pelo
¿Y qué te olvidás? Normalmente nada
Cuando tenés tiempo lo dedicás a… Ir a
ver tiendas, pasear, hacer deporte, leer
¿Qué pedís que te lleven los que van a visitarte? Nada en especial
Un sueño cumplido… Haber ido al
Carnaval de Venecia
Y uno por cumplir… Vivir en
Paris